Dame los primeros siete años de vida de un niño y te diré lo que será el hombre del mañana.

Sin duda, enseñar a un niño es uno de los trabajos más bonitos y enriquecedores que puedan realizar los maestros con verdadera vocacion de servicio. Los primeros años de vida son los más decisivos en la vida de una persona. En la infancia se forma la personalidad, y se realizan los primeros aprendizajes: motores, cognitivos, afectivos, sociales... Por ello, el trabajo de los educadores resulta esencial no sólo en el cuidado del niño, sino en cómo abordará las siguientes etapas de su vida, tanto a nivel escolar como personal y sin dejar a un lado el importante trabajo impostergable del hogar madre, padre y entorno, pues aqui estaran sus bases para consolidar armoniosamente  los proximos años de su vida.